Obra derivada de CC-BY 4.0 ign.es MTN50ImpresoSerie 1875-2022
Frente importante, estabilizado en su conjunto desde hace más de seis meses. La vigilancia es rigurosa y continua por ambas partes. A pesar del secreto en la preparación de la ofensiva, los movimientos no pasan desapercibidos para las fuerzas nacionales.
Hasta el 14 de junio no registran los puestos de vigilancia de estas fuerzas ninguna actividad en el campo enemigo;.
El 14JUN la 11 División da cuenta de un movimiento extraordinario de vehículos en la zona Torrelodones-Villalba-Cerceda, actividad que confirman los observatorios de la Sierra propios de la 71 División. A la vez, un evadido declara la visita al frente de “un jefe ruso”, el cual ha practicado un detenido examen.
El 15 vuelan algunos aviones de reconocimiento sobre Las Rozas, Torrelodones, Colmenarejo, Galapagar y Valdemorillo, no observando nada anormal.
Del 15 al19 decrece el movimiento de vehículos.
El 17 la 11 División comunica que
“la circulación que se da en los partes no responde a la realidad, porque hasta medianoche los coches circulan con los faros apagados a favor de la luz de la luna”.
El 20, otro evadido concreta que se prepara una ofensiva para romper el frente desde Navalagamella a Las Rozas y progresar entre los ríos Perales y Guadarrama.
El 22 la información es más precisa. Evadidos identifican las Divisiones de Lister y “El Campesino” en la zona de Torrelodones.
El 22 y 23 se localizan reclutas en instrucción en Cerceda, Becerril y El Escorial y la presencia de internacionales en Villalba y Torrelodones.
Las noticias y observaciones se multiplican a medida que avanza el tiempo y se llega a una gran precisión respecto a los propósitos del enemigo. El 28 el Ejército del Centro sintetiza el cúmulo de informes en estos términos:
“Ataque entre Navalagamella y Las Rozas, en dirección a Quijorna, con objeto de establecer una línea que sirva de base de partida para un fuerte ataque posterior”.
A partir del día 30 se aprecia otra vez un notable incremento de la circulación rodada.
La 71 División concreta sus informes, asegurando que
“no se puede precisar las direcciones (de dicha circulación), porque en todos los sentidos hay luces sueltas”;
mientras que la División 11 señala que el movimiento es, en forma dominante, hacia Torrelodones y Villalba.
En las jornadas siguientes se llega a localizar el transporte en camiones de carros de combate y piezas de artillería, y el 4 de julio el movimiento automóvil llega a calificarse de extraordinario.
Los días 3 y 4 vuela la aviación propia, que no observa movimiento alguno desde El Escorial a Torrelodones. La enemiga actúa intensamente a partir del 1 de julio en extensos vuelos de reconocimiento, bombardeando además muchas localidades de retaguardia -Toledo, Talavera, Arévalo, Burgos, Venta de Baños, Chapinería, Navas de Riofrio, Valdemoro, Añover, Seseña, Ciempozuelos, Robledo de Chavela, Mocejón y Navalcarnero- más el aeródromo de Arenas de San Pedro.
El día 5 varios evadidos, algunos de la División de Lister, dan a conocer la inminencia del ataque con abundantes detalles.
La última información procede del VII Cuerpo es muy exacta: se trata de envolver todo el frente de Madrid .
«Otro evadido en Segovia dice que el día anterior personas afectas a la causa nacional le facilitaron documentación apropiada y un coche para situarlo en cierto sector del frente de la Sierra poco vigilado, encomendándole la misión de pasar el campo nacional y dar pronto aviso de que el Mando rojo tiene preparada una gran ofensiva que partirá de Valdemorillo, para profundizar hacia la carretera de Extremadura y envolver todo el frente de Madrid, desde Las Rozas a los Carabancheles.»
El plan para mantener en el más riguroso secreto la ofensiva proyectada falla.
También se han detectado serios indicios de una próxima maniobra de gran envergadura en Aragón. A lo largo del mes de junio las fuentes del Servicio de Información nacional anunciaban ese proyecto y el V Cuerpo (Aragón) recibió muchos despachos en tal sentido. Pero las noticias más alarmantes procedían del extranjero; todas las personas que cruzaban la frontera se mostraban aquí muy explícitas y la Prensa catalana declaraba la proximidad de una gran operación en el valle del Ebro. Otros informes más detallados señalaban sólo su posibilidad indudable, pero no en plazo próximo. El teniente coronel Mateo Marcos
“En la amenaza de ataque en Aragón hubo mucha fantasía y algo de acción de contrainformación del enemigo, pero hubo también muchos hechos reales.”
La preparación de una ofensiva a largo plazo en tierras aragonesas era un hecho y tuvo luego pleno desarrollo en el mes de agosto del mismo año 1937.
Por lo demás, parece evidente que el Mando nacional no evaluó suficientemente la envergadura de la operación en proyecto, considerándola como una de tantas que el enemigo llevaba a cabo y que se solían resolver solo con el empeño de reservas locales.
Hasta el mismo día 5 en que ya se reciben noticias alarmantes, no se tomaron las medidas precisas, todavía muy limitadas. Sólo se mueve alguna pequeña reserva, que fue repartida por las posiciones de los valles del Perales y del Guadarrama.
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El 3 de julio se lleva a cabo la exposición de planes a los jefes de Cuerpo de Ejército y División.
El 4, reuniones informativas con los comandantes de las Armas y Servicios y Oficial de enlace con la Aviación.
Las fuerzas vivaquean en una extensa zona cubierta de monte alto y bajo, a cubierto de la observación aérea.
- Las del V Cuerpo entre El Escorial y la línea ideal Navalquejigo-Valdemorillo,
- y las del XVIII, al Este de dicha línea hasta Torrelodones,
teniendo ambos como eje viario la carretera El Escorial-Las Rozas.
El 4, los dos Cuerpos de Ejército se desplazan hacia el Sur: el V alcanzaba las proximidades de Valdemorillo y el XVIII las del vértice Madroñal.
El batallón Especial de la División Lister, encargado de llevar a cabo la infiltración principal y más peligrosa, había sido intensamente preparado.
Lister
Durante bastantes noches, los hombres del Batallón Especial se introdujeron en territorio enemigo, del que regresaban con preciosas informaciones sobre todo lo que hacia el enemigo durante la noche : sus idas y venidas, lugares vigilados y formas de vigilancia, fortificaciones, etc. Cuando a las 10 de la noche del 5 al 6, las fuerzas de la 11 División comenzaron a salir de los pinares cercanos a Valdemorillo y a marchar hacia el espacio libre entre Quijorna y Villanueva de la Cañada, 3 kms., los combatientes del Batallón Especial comenzaron a introducirse ya por ese boquete y avanzaban en territorio enemigo jalonando el camino que había de recorrer la División.».
Vísperas de la batalla, esperanzas y los temores.
Teniente coronel Rojo
“Un entusiasmo nuevo llenaba el ambiente; aquellos hombres se sentían orgullosos de lanzarse a una empresa ofensiva de importancia y ciertamente lo hacían con una disciplina y orden perfectos”
Prieto
Acabo de llegar del campo, donde he revistado algunas fuerzas que van a tomar parte en las operaciones. El espíritu de ellas parece admirable; desde luego dan una gran sensación de unidad, disciplina y entusiasmo. He dirigido la palabra a una de las Brigadas y cuando he terminado mi breve discurso los soldados contestaron con vítores y aclamaciones.».
Azaña
Sobre la operación de Madrid me dice [Prieto] que, a su juicio, nos descubrirá lo que va a ser la guerra para nosotros. Si fracasa, cree Prieto que ya no hay nada que hacer. El ejército de Madrid no puede ser llevado a otra parte. Es el mejor, y se le está reforzando. Se llevará toda la aviación disponible, y una masa de artillería. Si con tales elementos no se consigue un buen éxito, no podrá obtenerse en ninguna parte. Si la operación resulta bien, el efecto militar, y más aún el moral, serán muy grandes y podremos respirar. Por mi parte, creo que esta operación, aun saliendo bien, aliviará la situación de Madrid, pero sobre el resultado total de la guerra quizá no influya tanto como se espera. ¿Y si las cosas salen mal y usted adquiere la convicción de que no se puede ganar la guerra, qué se hace? A mi parecer, habría llegado el caso de emprender una política consecuente con esa convicción. Lo difícil, lo imposible, es decirle a la gente desde el Gobierno que la guerra se va a perder.»
Domina la euforia. En la tarde del día 5, Negrín, presidente del Consejo, recorre en automóvil la zona de concentración, siendo aclamado, y al puesto de mando, situado en la finca denominada Canto del Pico, acuden pronto gran número de ministros, aparte del Presidente Negrín y del titular de Defensa Prieto, con corresponsales españoles y extranjeros. Prieto y Dolores Ibarruri arengan a las tropas y todos esperan que la operación sea un éxito sin precedentes. Es más, se piensa celebrar un Consejo de Ministros en Madrid en cuanto se ocupe Majadahonda, para conmemorar el triunfo seguro .
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A las 050330H, de noche, ocho baterías y un tren blindado abren fuego intenso sobre las posiciones nacionales de Cuesta de la Reina. Fuerzas de la 9 División (mayor Rubert), pertenecientes al III Cuerpo de Ejército, se lanza al ataque con catorce carros en vanguardia. Los nacionales rechazan el asalto.
Por la tarde se repiten los ataques, con el apoyo de varios aviones, y se reiteran durante la noche. No se consiguen resultados.
La aviación ha bombardeado la Cuesta de la Reina, Ciempozuelos, Añover, Borox y Valdemoro, más los nudos de comunicaciones de Navalcarnero y Valmojado.
Dada la información en poder de los nacionales sobre importantes movimiento de fuerzas, estos ataques producen gran alarma en los cuarteles generales.
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Diario de Operaciones de la 14 División nacional
A las 3,30 horas de este día el enemigo abrió un fuerte tiroteo frente a la casa del Majuelo (Seseña), iniciando una hora después la artillería un violentísimo bombardeo a la Cuesta de la Reina y menos intenso sobre el resto del frente de Seseña, sin omitir a este pueblo, que hicieron creer fundadamente en la inminencia de un ataque. El teniente coronel don Emilio Alamán, jefe accidental de la 3ª Brigada, que tenía su puesto de mando en Illescas, lo trasladó sin pérdida de tiempo a Seseña.
Las fuerzas de que se disponía para rechazar el ataque eran : primer Bon. de Argel, 17 guardias civiles con dos ametralladoras, 2º Tercio de requetés «Alcázar», cuyos efectivos no sumaban 400 hombres, una batería de Montaña de 7 cm. y una batería de 10,5 con sólo dos piezas en condiciones de tirar.
Al amparo de ocho baterías de artillería y un tren blindado, la infantería roja ganó terreno hacia nuestras líneas, particularmente por el flanco izquierdo de la Cuesta de la Reina, a cuya disposición atacó en primer término protegida y apoyada por catorce carros de combate rusos, actuando nueve de ellos en el flanco citado y los otros cinco en el resto del frente de la posición antedicha. El ataque fue enérgicamente rechazado, perdiendo durante el mismo el enemigo dos carros, que dejó abandonados a pocos metros de nuestras trincheras, y cogiéndose vivo al conductor de uno de ellos. A la media noche, el enemigo hizo objeto de un violento ataque a Cuesta de la Reina, llegando a combatir con granadas de mano, pero sin que el enemigo lograse resultado positivo alguno.»