La batalla del Ebro representa el momento culminante de la Guerra Civil.
Será el último esfuerzo del Ejército Popular de la República. La República empeña sus mejores fuerzas y Franco, entre las diversas líneas de acción, elige detener el avance sobre Valencia y acudir allí donde se encuentre el enemigo, hacerle frente y destruirle.
Cuando ya las reservas nacionales han acudido a la zona, cuando ya la bolsa de Gandesa se ha cerrado y el Ejército del Ebro no tiene ninguna posibilidad de romper la línea nacional y continuar el avance, el Alto Mando republicano pudo haber ordenado el repliegue, repasar el Ebro y salvar la mayor parte de la fuerza allí empeñada. Pero no lo hizo.
El combate será terrible y el desgaste en ambos bandos enorme. Pero con una gran diferencia, el ejército nacional puede reponer las bajas y el Ejército Popular de la república ya no dispone de esa capacidad.
El 16 de noviembre de 1938, Tagüeña repasará el Ebro por Flix y el 13 de febrero de 1939, tres meses más tarde, el Ejército del Ebro y el Ejército del Este estarán ya en Francia.
Kindelán y Belforte la denominaron de manera más precisa la Batalla de Gandesa.
Para el Alto Mando de la República la situación está clara: las desgastadas fuerzas de Cataluña necesitan descanso. Las del Centro-Sur, no. En el centro se dispone de medios suficientes para defenderse primero y contraatacar. Al Norte del Ebro se precisa tiempo para reponer bajas y reconstituir Unidades.
Castro Delgado
«Se desprendía pues, que el peso de las acciones principales debía corresponder a la zona Centro-Sur. Cataluña debía jugar un papel auxiliar.»
Más tarde matiza
«Hasta entonces a la ofensiva de Levante se podía oponer la concentración sucesiva de todas las reservas generales hasta conseguir ahogarla. Ahora esto ya no era posible; a la acción enemiga había que responder necesariamente con operaciones activas y ofensivas, en la región no atacada, Cataluña o zona Centro-Sur. Esto era lo nuevo en el planteamiento de las formas de lucha correspondientes a la nueva situación»
Valencia se encuentra ya en inminente peligro.
Según Castro, las decisiones estratégicas del Estado Mayor Central, general Rojo, llevaban el orden de prelación siguiente:
- resistencia en Levante,
- ruptura en el Ebro,
- ofensiva en Extremadura y Andalucía.
La operación del Ebro tenía la misión exclusiva de defender Valencia. La gran ruptura por Extremadura y la siguiente invasión de Andalucía aspiraban a provocar el colapso del Ejército de Franco. Aunque no he podido, de momento, localizar documentos que lo confirmen, mi opinión es que la Batalla del Ebro, por Fuerza empeñada y objetivos posibles, siempre fue una acción secundaria. La operación principal se encontraba en Extremadura. Por las razones que fuesen, la principal se frustró antes de comenzar y la secundaria se convirtió en principal. Con los resultados conocidos.
Hay factores favorables a la acción principal desde Cataluña, todo se puede justificar. Abierta la frontera francesa para el paso de armamento y equipo, situación internacional, etc. Pero entonces ¿cuál era el objetivo estratégico de Rojo? ¿simplemente detener el avance sobre Valencia? ¿Conseguir unos meses de tiempo a costa de destruir el núcleo más potente del EPR?
Tiempo se consiguió pero no el necesario. El 13 de febrero del 39 todas las fuerzas del EPR en Cataluña se encontraban en Francia.
La acción del Ebro aun logrando el máximo éxito no hubiera llegado mucho más lejos de donde llegó. El Ejército del Ebro no contaba con potencia suficiente para hacerlo y el EPR no estaba en condiciones de apoyar e impulsar mayor avance en esa zona de operaciones.
El Ebro discurre a lo largo de unos 60 kilómetros, entre tajos y hoces, con bruscos meandros. Pasado Cherta, el terreno se abre en una dilatada llanura formándose un amplio delta.
El río alcanza en algunos puntos profundidades hasta de más de cinco metros, con una media general de 3 a 3,5 metros, siendo su caudal de 250 metros cúbicos por segundo y su velocidad media de uno a dos metros por segundo. La apertura de las compuertas de los embalses situados en las cuencas del Gállego, Cinca, Alto Ebro y Noguera Pallaresa, provocaría importantes incrementos del caudal y de la velocidad de la corriente.
Entre la confluencia del Ebro con sus afluentes Segre y Matarraña, entre Mequinenza y Fayón, se presenta una meseta con algunas alturas entre 200 y 400 metros (vértice Alto de los Auts, 434 metros). El terreno cae bruscamente al llegar al río formando profundas vaguadas y barrancos. Terreno estepario y monte bajo. No hay cursos de agua en esta época, sólo arroyos secos y barrancadas. De Gandesa, por Villalba y Pobla, una carretera mala lleva a Fayón, de aquí a Mequinenza, y luego, pasando el Ebro, a un cruce próximo a Fraga. En Fayón no hay puente sobre aquel río.
La batalla se desarrolla en el terreno que se extiende a partir de Fayón y llega hasta Cherta. Es un semicírculo, con centro en Gandesa.
Se divide en tres sectores, según el estudio del terreno de Juan Modesto Guilloto:
«El sector Norte, desde Fayón hasta Ascó, unos 30 kilómetros, abarcaba la Sierra de Fatarella, muy accidentada, con alturas superiores a 400 metros, pendientes pronunciadas, cubiertas de olivares, avellanos y almendros que, formando pequeñas terrazas, llegaban hasta el río. La comunicación fundamental era un camino asfaltado, paralelo e inmediato al río, que unía a Flix con Ascó. También había un camino de montaña utilizable que cruzaba la Sierra de Fatarella. Los restantes eran estrechos y accesibles solamente para infantería y transporte a lomo. Aquí el río tenía una anchura de 150 metros, con orillas altas y escarpadas.
Los lugares más cómodos para su forzamiento estaban en el sector Ribarroja-Flix, donde las orillas eran pendientes suaves.
»El sector Central, de Ascó a Miravet, 20 kilómetros, fuertemente accidentado y cruzado por la Sierra del Aguila, arrumbada de Suroeste a Nordeste, compartimentaba el terreno entre Mora de Ebro y Aseó. Las alturas de este contrafuerte eran el vértice Aguila en la parte Norte ( 487 metros) y el vértice Picosa al Sur (496 metros). La comunicación fundamental era la carretera que, prolongación de la de Flix-Ascó, pasaba al Oeste de la Sierra del Aguila y en Venta de Camposines se unía a la carretera general que lleva de Mora de Ebro a Gandesa, apta para toda clase de transporte. Ambas en los flancos del Sector Central. Las orillas del río en la región de Ascó y al Sur de Mora de Ebro eran pendientes suaves, cubiertas de olivos y frutales. La anchura del río no pasaba de 100 a 120 metros.
»El Sector Sur, de Miravet a Benifallet (10 kilómetros), se caracterizaba por la existencia en ambas orillas de alturas de 300 metros y más, que en la occidental se van elevando hasta unirse a las crestas de Pandola, que constituyen un fuerte baluarte en los accesos de Gandesa. Las orillas del río, altas y escarpadas, sólo permitían el forzamiento en el sector de Ginestar. La anchura de la corriente, igual que en el Sector Central.
»Del examen del terreno inmediato al río, como del despliegue del enemigo, resaltaba como el más conveniente para el forzamiento el Sector Central, en su parte Norte, al Sur de Ascó.
»Y esa fue mi decisión, compartida con mi Estado Mayor. Esa era también la del Estado Mayor Central. El curso de los acontecimientos justificó dicha elección.»
Gandesa es el centro del territorio en que iba a librarse la gran batalla y sobre todo el nudo principal de comunicaciones de la zona . Es la población de mayor importancia, cabeza de partido judicial, con unos 3.400 habitantes. Allí confluían dos carreteras de primer orden: la de Alcolea del Pinar a Tarragona por Mora la Nueva y la que desde Gandesa lleva, por Cherta, a Tortosa, donde se une a la general de Barcelona a Valencia. También, y por carreteras secundarias, se llega desde Gandesa a Villalba de los Arcos, Pobla de Masaluca, Fayón y Mequinenza, y en otra dirección a Bot y Valderrobles.
Más allá de Gandesa, a 12 kilómetros y por la general de Tarragona, se encuentra la Venta de Camposines, punto importantísimo en el desarrollo de la batalla, de donde partían dos carreteras secundarias, una a La Fatarella y la otra a Ascó. Por la de Tortosa , a 8 kilómetros, se encuentra Pinell, desde donde se puede llegar a Miravet, Benisanet y Mora de Ebro.
La posesión de Gandesa es crítica.
Dos ferrocarriles en la zona.
- Uno, el de Madrid a Zaragoza y Barcelona, por Reus y Tarragona, que entra en zona por el Norte de Maella y pasa el Ebro frente al pueblo de García.
- El otro , el llamado de Val de Zafra a San Carlos de la Rápita, no estaba en servicio pero tenía construida la mayor parte de las obras de fábrica. Parte de Alcañiz, pasa al Norte de Valderrobles y tenía estaciones en Bot, Prat de Compte, Cherta y Tortosa. Tras la gran ofensiva nacional del Valle del Ebro en marzo-abril se habilitó y puso en funcionamiento hasta Bot.
Gandesa se encuentra dominada por elevaciones en todos los sentidos.
- Al Norte estaba la Sierra de Fatarella prolongada hacia el Oeste, con altura más destacada en el vértice Gaeta (548 metros), zona muy abrupta e irregular.
- Por el Sur, la Sierra de Caballs (vértice Caballs, 650 metros) se prolonga a través de la imponente Sierra de Pandols, de acceso difícil por sus profundísimas cortadas, con el vértice Puig Caballé (709 metros). El río Canaletas aparece al Sur de esta Sierra, corriente de agua continua escasa, abastecimiento crítico durante la batalla.
Zona eminentemente agrícola con viñedos, higueras y almendros principalmente, bastantes bosques en la serranía. Fábrica de industria electroquímica en Ascó.
Desde Cherta a Mora el escenario cambia, con huertas abiertas y despejadas.
A partir de Tortosa el terreno se convierte en una gran llanura con alguna pequeña altura. En Amposta, los arrozales y las acequias constituyen la nota dominante.
Yagüe tiene el frente asignado organizado en tres Sectores.
- El Sector del Segre a las órdenes del general Barrón, en línea la 40 División (coronel Badía). El sector cubre el frente desde su extremo izquierdo al Ebro.
- El Sector de Gandesa del coronel don Luis Campos Guereta, jefe de la División 50, se extiende hasta Cherta, excluido.
- El Sector del Bajo Ebro, hasta el mar, a cargo de la 105 División, al mando del coronel don Natalio López Bravo.
La Brigada I/13 es la reserva de la División 40.
La Brigada II/13 está dividida entre las Divisiones 50 y 105, forma las reservas de las mismas.
La 40 División tiene agregada una bandera del Tercio.
El BON de ametralladoras XXXVII está repartido entre las Divisiones 50 y 105.
La 150 División tiene agregados dos batallones de la División de Caballería y una sección de carros.
Despliegue detallado
A) Sector de Gandesa
- Subsector Mequínenza-Fayón: XVII batallón de Burgos y VII de Valladolid (de la II Brigada de la 50 División), y a retaguardia y como reserva la XVIII bandera, unidad independiente, que no figura en la relación de fuerzas de la orden del 3 de julio.
- Subsector Fayón-Ascó: En línea el XVI batallón de Burgos y el XVI de Mérida; reserva, el IV de Gerona, en Fatarella; todos de la II Brigada de la 50 División.
- Subsector Ascó-Miravet: En línea, el XVII batallón de Mérida y el VII de Arapiles (I Brigada de la 50 División) y en reserva el XII de Bailén, en la Venta de Camposines (II Brigada).
- Subsector Miravet-Cherta: En línea el IX de San Quintín y el V de Flandes, y como reserva el XIX de Zamora, en Corbera, y el XXI de Zaragoza, en Prat de Compte, todos de la I Brigada de la 50 División .
- La 50 tiene tres unidades de la 13 como reserva del Sector: el III batallón de la Victoria, situado en Corbera, el V tabor de Melilla, en Gandesa y el tabor de Ifni-Sáhara en la carretera de Pinell. Dos compañías de ametralladoras del batallón XXXVII estaban repartidas a lo largo de este frente.
B) Sector del Bajo Ebro
- Subsector de Tortosa: batallones CII y CIII en línea y el CI en reserva, en Regüés; todos de la I Brigada de la 105 División.
- Subsector de Amposta: batallones CX, CXI, CVIII y CVII en línea y los CXII, en Santa Bárbara, y CIX, en San Carlos de la Rápita, como reserva; todos de la II Brigada de la 105 División.
- Tres compañías, dos de ametralladoras y una de fusiles, del batallón XXXVII, distribuidas por el frente.
- Reserva del Sector, unidades de la 13 División: IV bandera del Tercio, en La Galera; I batallón de tiradores de Ifni, en Ulldecona, y batallón CCLXII, en Freginals. Además batallón ciclista y el CCXCII batallón de tiradores de Ifni, de la División de Caballería.
Pronto se agregarán dos banderas del Tercio, las independientes XVI y XVII.
Cuarteles Generales.
- Ejército del Norte en Zaragoza
- Cuerpo Marroquí, en Caspe
- 13 División, próximo a la carretera de Lérida y Vilanova de Alpicart,.
- 50 División, en Gandesa.
- Brigada I/50, teniente coronel Peñarredonda, en Pinell.
- Brigada II/50, teniente coronel Capablanca, en Fatarella.
- 105 División, en Ulldecona.
«Desde el momento de hacerse cargo el Cuerpo de Ejército Marroquí de su nuevo frente, flota en el ambiente una amenaza de ofensiva».
Boletín informativo del Cuerpo Marroquí correspondiente al día 04JUL
Siguen los rumores referentes a intentos de paso del Ebro. Las zonas neurálgicas parecen ser que son la de la Isla, frente a Ginestar, y la del delta del Ebro.
Se habla de dos Cuerpos: el V (Divisiones 11, 42 y 46) y el XV (Divisiones 3S, 4S y 44), más una 3ª División independiente y un XII Cuerpo (no integrado en la Agrupación), con las Divisiones 16 y la llamada «M». Se conoce la presencia sobre el terreno de las Internacionales XI, XII y XIII, así como de las Divisiones ya señaladas, algunas de calidad excelente y no desconocidas .
Un evadido del día 6 habla de la concentración en Cherta de 300 a 350 barcas.
El 10 de julio se pasan cinco individuos y en el Boletín Informativo correspondiente se dice
«Continúan los rumores del forzamiento del Ebro, sin precisar el lugar. Se confirma la existencia de un puente preparado para el paso del río por las proximidades de la isla de Buda. Hace unos días que el batallón divisionario de la 46 División realizó varios ejercicios consistentes en lanzarse la fuerza, por escuadras, a unas barcas varadas en la playa, embarcar rápidamente, desatracadas y remar con todo vigor.»
El 14 de julio el Cuerpo de Ejército Marroquí dice en su Boletín, entre otras
«Todas las informaciones concuerdan en señalar que el enemigo dedica toda su actividad a ejercitar sus tropas en las operaciones propias de forzamiento de corrientes de agua.»
«Concreta y prepara material de puentes (isla de Graciá, inmediaciones de Ginestar, río Ciurana)».
«Todo ello, así como las conversaciones que circulan entre los rojos demuestran de un modo indudable que el enemigo persiste cada vez más en sus intenciones de forzar el Ebro, en plazo quizá próximo, y por lugar no determinado, pero que bien pudiera ser uno o varios de los siguientes: Isla de Graciá, Illetas-La Isla-Benisanet y Mora-García».
El 15JUL
«Se acentúa cada vez más la impresión de un ataque próximo … ”·
El 19JUL
El enemigo, para dar comienzo a su ofensiva por el Bajo Ebro, está pendiente de la llegada de nuevos elementos, tanto en hombres como en material
El 03JUL. «Instrucciones sobre fortificación y defensa de la línea del Ebro» de Yagüe.
- La línea de vigilancia lo más próxima posible a la misma orilla y se compondrá de pequeños puestos de escuadra, y como máximo de pelotón, que cruzarán vistas y fuegos. «Los puestos se distribuirán con arreglo a las Instrucciones del Generalísimo, se blindarán con rollizos y tierra contra el ametrallamiento de las cadenas, los morteros y los cascos de artillería, enmascarándose y cubriéndose con ramajes y redes, y rodeándose de alambradas, a ser posible ocultas por la maleza.
- En los vados, además de sembrar abrojos, se pondrán alambradas, que los desborden cincuenta o sesenta metros aguas arriba y aguas abajo.
- Las reservas de tropas se situarán en sitios cubiertos a las vistas, construyéndose refugios dispersos y cambiándose de día sus emplazamientos.
- Deberá construirse «una magnífica línea de observatorios», que estuviesen ocupados día y noche.
- Las unidades de sostén y reserva «pondrán emboscadas en sitios de paso obligado o paso probable».
El 13 de julio, Yagüe ordena a las Divisiones 50 y 105
la construcción de blokaus de cemento para pelotón y escuadra en las partes más peligrosas del río, a fin de dar más solidez a la línea de vigilancia, en beneficio de su defensa a toda costa, con el máximo de efectivos».
A la vez se procede al estudio de una línea de detención, que se fortificará
«con la máxima actividad », para cortar la penetración enemiga posible mediante elementos de resistencia, susceptibles de agruparse en puntos de apoyo y de impedir los envolvimientos.
Modesto extrema la vigilancia de la orilla derecha del Ebro, desde el mismo día que lo cruzaron sus fuerzas, en el mes de abril.
Ya el 20 de ese mes, el jefe del XV Cuerpo de Ejército da un informe muy acabado. Tagüeña
«Se hace constar que todos los puentes del sector de este Cuerpo de Ejército se encuentran volados; no obstante, el río puede ser vadeable por los puntos que se marcan en el superponible adjunto y por el puente situado al Norte de Granja de Escarpe ( sobre el Segre), que sería conveniente volar».
21JUL. «Anticipo al programa de Investigación número 1», Se señala que la actitud del enemigo es de simple vigilancia, «no habiéndose advertido ningún indicio que delate intenciones de cruzar el río Ebro». Se señalan una serie de «puntos de paso favorables». La ampliación de ese programa, de igual fecha, dará normas muy detalladas sobre aspectos a tener en cuenta en “Información”.
El 22JUL se agrega otro programa destinado al grupo de escucha y radiogoniometría de la Agrupación del Ebro.
Del 28ABR existe una relación muy acabada de los observatorios del XV Cuerpo, algo similar habría sobre el V Cuerpo . Se precisan los observatorios de las unidades de Infantería y Caballería, completándose aquél con otro, de fecha 02MAY, donde figuran los observatorios artilleros, de ambos CEs.
El 07MAY se dan instrucciones generales para la mejor observación del campo enemigo.
Los partes de información que siguen son muy completos y detectan los menores movimientos de fuerzas en el otro lado del río, con los relevos correspondientes, concediéndose suma importancia a las posibles intenciones de esas fuerzas de pasar u no pasar el Ebro.
Varias veces se repite la frase:
«Por la actitud del enemigo no parece desprenderse que inicie ninguna acción ofensiva.»
En esta primera fase hay temor ante posible continuación de las operaciones nacionales sobre Cataluña.
Franco ha decidido por objetivo Valencia y descarta Barcelona. Vicente Rojo decide preparar la maniobra de cruce del Ebro y atacar por la espalda a las fuerzas enemigas que avanzan por Levante.
02JUL. El Boletín de Información del V Cuerpo:
«Las características que se desprenden del parte del día de hoy son las de un frente estabilizado, que no nos hace creer una agresión por parte del enemigo.»
Los parles del XV Cuerpo de Ejército son muy parecidos.
04JUL. Parte
«Conclusión. Por los datos recogidos durante la jornada no es de esperar un cambio en la actitud pasiva del enemigo en las próximas veinticuatro horas.»
Los partes del Ejército no difieren en ambos Cuerpos de Ejército.
15 JUL
«Continúa el enemigo su actitud defensiva, intensificando en algunos puntos la organización del terreno, no siendo, por tanto, de temer ninguna acción ofensiva»
17JUL
«No es de esperar un cambio inmediato en la actitud pasiva del enemigo»
21JUL
«Continúa el enemigo su estrecha vigilancia aérea en el Sector Sur y con menos intensidad en el Centro. No es de suponer varíe su actitud defensiva»
23JUL
«No es probable un cambio inmediato en la actitud pasiva del enemigo»
Vicente Rojo
«La difícil maniobra a que nos habíamos aventurado tuvo una preparación minuciosa»
Antonio Cordón
«Fue preparada la operación en forma extraordinaria, con ejercicios de adiestramiento de las fuerzas en el vadeo de ríos y por medio de un inteligente trabajo político que contribuía a sostener y aumentar su ya elevada moral colectiva»
Modesto
«A la maniobra del paso del río se dedicaban cientos de horas; las Divisiones acampadas en interior hacían la preparación en barrancos; las de la costa en el mar. Todo se hacía en cubierto, bajo el nombre de Ejercicios Tácticos, con mayúsculas»
Modesto señala que en estos trabajos se instruye especialmente la 42 División con la consigna “Ríos de sudor para evitar gotas de sangre”»
Líster
«Nos pusimos rápidamente, pues, a la tarea de organizar un sistema de defensa del frente que nos había sido encomendado, con el máximo de solidez, empleando en él la menor cantidad posible de fuerzas, dedicando la masa fundamental a su instrucción para el paso del río y para operar al otro lado. Desde el Estado Mayor del Cuerpo de Ejército hasta el pelotón, cada unidad y cada servicio comenzó, desde fines de abril, una intensa instrucción. Los ejercicios eran de los más variados, pero todos ellos tenían un primer objetivo común: el paso del río. Una atención especial se le prestó a la preparación de cada hombre; muchos aprendieron a remar y millares a nadar. Funcionaron a pleno rendimiento las escuelas de cabos, sargentos y oficiales»
Manuel Tagüeña
«Realizamos un completo reconocimiento de la cuenca, comprendiendo vados, perfiles del fondo, puntos de paso con barcas, donde se podían tender los puentes, accesos a las orillas, zonas de concentración y de espera, zonas de dislocación de las unidades a cubierto de los observatorios enemigos y escalonamiento de los servicios de suministros y de evacuación. Nuestros artilleros reconocieron los futuros emplazamientos de la artillería de refuerzo. Mi jefe de Ingenieros llevó a cabo una intensa labor de reparación de caminos y pistas y de construcción de otras nuevas que mejorasen las comunicaciones con la orilla. Buscó embarcaciones en los pueblos de la costa, reuniendo unas 80 barcas, y construyó con toneles, fáciles de conseguir en una región vinícola, dos pasaderas para infantería»
Henríquez Caubín, JEM de la 35 División
«Todos los ejercicios tácticos realizados, tanto de conjunto como aisladamente por las Unidades, tenían siempre un tema fijo y constante en su primera fase: la maniobra de paso de ríos. A tal efecto, se aprovechaban los cursos de los barrancos para todas las prácticas. Careciendo de barcas, simulábamos éstas con tablones semienterrados en los fondos secos y arenosos. Las marchas y los combates nocturnos tenían lugar preferente en todos nuestros temas.» «Teníamos que conocer absolutamente todos los datos que pudiesen sernos de interés desde el punto de vista militar; con respecto al río en sí mismo, sus vados, sus profundidades, velocidades de su corriente en el mayor número de puntos. La configuración de sus playas, de la vegetación, de sus acantilados, etc. Deducir por los datos anteriores, tanto en lo referente a la orilla propia y enemiga, cuales podían ser los puntos de paso más apropiados; clasificar éstos según los accesos desde nuestro interior y facilidades de penetración en territorio enemigo»
Cecil Eby, soldado de la División 35
«Una noche, a primeros de julio, se produjo una maniobra nocturna que les dejó sin aliento y aterrados. Salieron del campamento con todo el equipo, anduvieron nueve millas por un camino escabroso, y al amanecer llegaron junto al cauce seco de un riachuelo. Allí se dividieron en pelotones, cruzaron el riachuelo a bordo de unas lanchas imaginarias y asaltaron una montaña desde la cual disparaban por encima de sus cabezas fusiles y ametralladoras. Diariamente, a partir de entonces, cruzaban ríos imaginarios y atacaban a un enemigo fuertemente atrincherado. No les dieron ninguna explicación acerca de aquellas maniobras, pero no la necesitaban. « ¡Ajá! Vamos a cruzar un río! » -decía un veterano, con fingida perplejidad-. ¿Qué río creéis que puede ser?
Tagüeña
A fines de mayo se llamaron varios reemplazos. Eran hombres de treinta a cuarenta años y muchos de dieciocho y diecinueve años: tenían que cubrir bajas y poner las unidades al completo de efectivos. También se empezó a recibir armamento, munición y equipo. La frontera francesa se había abierto de franca y abierta manera el 27 de marzo y la llegada masiva de medios de combate no era un problema. «Las armas que recibimos eran en su mayoría checoslovacas, quién sabe a través de qué caminos e intermediarios.»
«Cuando llegaron las primeras cajas de fusiles ametralladores, quedamos admirados de su ligereza y acabado.» También llegaron ametralladoras y morteros rusos.
El Ejército que pasó el Ebro estaba perfectamente armado y equipado.
Ramón Salas
«Los mandos de sus unidades eran en su mayoría abrumadoramente comunistas, partido que controlaba la jefatura del Ejército, la de los tres Cuerpos de Ejército y el comisariado de todas esas unidades. Los mandos divisionarios eran también comunistas en su inmensa mayoría.»
Azaña escribió en sus Memorias refiriéndose a lo que le contaba el general Hernández Saravia:
«Casi todo el Ejército del Ebro es comunista. Hay una especie de disciplina interior en cada unidad. Rojo le ha dicho que ya no hay republicanos».
Antonio Cordón
«El Ejército del Ebro, en el que la totalidad de sus mandos, desde el del Ejército hasta los de compañía, eran poco más de dos años antes obreros, campesinos y estudiantes, encarnaba la más genuina representación del Ejército Popular Español»
La moral estaba de manera muy desigual repartida. Había cansancio en los veteranos y muy poco interés en combatir en gran parte de los nuevos movilizados, muy mayores unos y muy jóvenes otros.
Ramón Salas
«Desde muy atrás el cuerpo de Carabineros se veía obligado a montar amplios servicios de vigilancia en las comarcas próximas a la frontera para evitar evasiones y aun sublevaciones, y los guardias del cuerpo de Seguridad tenían que cubrir servicios semejantes en el interior de la región y en las proximidades de los C. R. I.Ms., donde las deserciones llegaron a ser masivas. En estos centros de instrucción los desertores crecían sin cesar y los prófugos eran numerosísimos.»
«Los batallones de fronteras detenían docenas de individuos cada día, pero a pesar de ello eran millares los que lograban pasar al país vecino y de allí a la zona nacional. En el interior de Cataluña grupos de huidos, prófugos y desertores constituyeron pronto partidas importantes que fueron nutridas en el Montseny y en la cuenca del Gayá y muy numerosos los pequeños grupos que pululaban por las sierras limítrofes de las provincias de Lérida y Tarragona.»
«El desencanto de los nacionalistas catalanes y el cansancio de todos hizo que la moral de guerra en Cataluña descendiera a niveles tan bajos como los que hubo en Santander y aún inferiores.»
Cecil Eby, sobre desertores en las Brigadas Internacionales, dice:
A lo largo de la playa de Tarragona los burdeles hacían el gran negocio con el frente tan cercano pero los permisos para pasar la noche fuera del campamento eran muy difíciles de conseguir, porque con demasiada frecuencia servían para desertar.
El comisariado trabajó muy intensamente y la propaganda fue fuerte, formando parte de ella las visitas frecuentes al frente de personalidades políticas, nacionales y extranjeras.
16JUL. Primer documento concreto sobre el paso del Ebro.
Directivas del general Rojo al jefe del Ejército del Ebro. Dice que el Ministro de Defensa ha aprobado «la orientación general» de su proyecto.
La operación consistirá
- en la formación de «la cabeza de puente de Gandesa»,
- que en caso de éxito, «Se explotará en profundidad, para atraer hacia el Norte las reservas que están operando contra el Ejército de Levante».
- Se recalca que «el objetivo mínimo» es la citada cabeza de puente, donde deberá situarse, por lo menos, un Cuerpo de Ejército, el cual organizará defensivamente el terreno de forma que pueda resistir en él «cualquier reacción del enemigo».
El proyecto aprobado por Negrín no tiene fecha. Señala que si a la operación le acompaña el éxito la línea final a alcanzar será la determinada por Fayón, el río Matarraña, el pueblo de Monroyo, el vértice Carrascal y los pueblos de Morella y Catí
El proyecto inicial contempla
- una Acción principal,
- una Acción secundaria
- y una Acción complementaria.
La Acción principal, con tres fases:
- paso del río
- ocupación Primer Orden de objetivos. Definido por Fayón, Batea, sierra de Pandols y Benifallet;
- ocupación del Segundo Orden de objetivos. «Eventual », coincide con la línea final que llega hasta Catí.
Sobre la 1ª Fase se decía:
«Fuerzas ligeras, utilizando lanchones, lo cruzarán [el río] de noche y por sorpresa, simultáneamente por los puntos de Fayón, Ribarroja, Ascó, Ginestar y Benifallet.»
Esas fuerzas formarán pequeñas cabezas de puente en los puntos citados y en Mora, que se tomará «de revés» desde Ascó o Ginestar, creándose así una zona de seguridad que permitiría el despliegue de las columnas principales, las cuales habrían pasado el río por Ginestar y Ascó, sobre puentes construidos por tropas de Ingenieros, que además arreglarían el puente de Mora. Estas columnas en su avance ocuparán como puntos básicos los montes de Fatarella, la Venta de Camposines y las alturas al Este de Gandesa y Pinell.
En la 2ª Fase se forman dos columnas.
- Una marchaba según los ejes Ascó-Fatarella-Villalba-Batea y Ascó-Venta de Camposines-Gandesa, quedando al final ocupada la primera línea de objetivos desde Fayón a la sierra de Pandols.
- La otra columna (Columna Este) progresa utilizando como eje de marcha la carretera Miravet-Pinell, y su misión es llegar a la línea sierra de Pandols.
Para la 3ª Fase (eventual) se señala que el límite de la zona de acción de estas dos columnas será la Sierra de Pandols, el vértice Espina, los Puertos de Beceite, la sierra de Montenegrelo y los vértices Encanadé y Carrascal.
- La columna Oeste, con su flanco derecho fijo en Fayón, progresará según las direcciones Batea-Maella, Gandesa-Caseras-Calaceite-Valdetormo y Gandesa-Bot-Horta-Valderrobres-Fuentespalda-Monroyo.
- La columna Este seguirá sobre el eje Pinell-Tortosa-Vinaroz; alcanzada esta última localidad se buscará el enlace con la otra columna en el vértice Carrascal, y hacia Catí con el Ejército de Maniobra (que viene retrocediendo sobre Valencia).
La Acción secundaria tenía por objeto «atraer fuerzas y desorientar al enemigo». Dos acciones:
- una por Mequinenza
- y otra por Amposta, ambas de distracción,
pero en el documento se señala que si tuviesen éxito servirán, la primera para concurrir al ataque sobre Fayón, y la segunda para cortar la carretera general de Barcelona a Valencia hacia Santa Bárbara.
La Acción complementaria está a cargo del Ejército de Maniobra y se llevará a cabo en el sector comprendido desde Catí a la costa. La situación del Ejército de Maniobra no daba mucha credibilidad al desarrollo de esta acción.
En el apartado VII del Plan , «Período preparatorio»,
«el éxito de la maniobra depende de la fase preliminar del paso del río, la cual debe, por tanto, prepararse con el más minucioso cuidado».
Habrá que construir pistas de acceso, buscar aparcamientos para los lanchones, instruir especialmente a las fuerzas destinadas a utilizarlos, entrenar intensamente a todas, etc.
Castro Delgado habla de una reunión celebrada a primeros de julio en el domicilio del general Rojo. Asisten Líster, al mando acctal de Ejército del Ebro por ausencia de Modesto, el teniente coronel Sánchez Rodríguez, jefe de Estado Mayor y el teniente coronel Ruiz Fornells, jefe de la sección de Operaciones del Estado Mayor Central.
En la reunión se presentaron dos proyectos, concretados a dos direcciones de avance:
- Serós-Fraga-Sariñena
- y Gandesa-Valderrobres-Morella
Se elije la segunda.
Se dan tres Directivas, una de 15JUL y dos de 17 de julio.
La número 1 firmada de orden del Ministro por el general Rojo, establece una variación en el señalamiento de los órdenes de objetivos de la Acción principal.
- El primero seguía siendo el mismo,
- pero el segundo estaría determinado por Fayón, Batea, Valderrobres, Beceite y la margen izquierda de los ríos Cenia y Servol,
- quedando un tercero «a fijar por el Mando, como consecuencia de la situación».
En cuanto a la Acción complementaria ya no correrá a cargo del Ejército de Maniobra sino del Ejército del Este, que atacará por la región de Sort, dos jornadas anteriores a la acción principal.
Las otras Directivas del 17 de julio
- una dice «en previsión de que la maniobra a través del Ebro no pueda realizarse por dificultades insuperables» se ocupen las alturas de Fraga, para cortar las comunicaciones de Lérida, previéndose la ocupación de esta plaza;
- la segunda señala como Acción complementaria ocupar San Romá de Tabernolas, en la zona de Tremp, cortando la carretera del valle de Arán
Finalmente, la orden de operaciones de 22 de julio, que se verá en detalle más adelante.
Los días que precedieron a la operación fueron de tensión extrema por ambos bandos.
El último parte informativo del Cuerpo de Ejército Marroquí disponible es de fecha 24.
«Las últimas observaciones y noticias adquiridas permiten concretar algo sobre el supuesto forzamiento del Ebro. Se deduce de todas las informaciones recibidas que el enemigo refuerza todo su frente, demostrándolo así el movimiento anormal observado en las últimas noches de dirección general retaguardia a vanguardia. Este movimiento se acentúa más en las zonas de Mayals-Granja-Serós y de la Isla de Graciá. Pero donde la afluencia de vehículos ha sido mayor durante los pasados días ha sido la zona de Rasquera-Ginestar. Estas suposiciones deducidas por la observación directa, vienen a ser confirmadas por las declaraciones de varios evadidos», algunos de los cuales acusaban la existencia, ya conocida, de material de puentes, bastante heterogéneo, en las regiones de Isla de Graciá, Barranco de los Frailes (Ginestar-Rasquera) y río Ciurana (Este de García). «De todo lo expuesto parece deducirse:
1º El ataque enemigo está para iniciarse de un momento a otro.
2º Tal vez se inicie simultáneamente, por los sectores Serós-Granja, García-Mora, Ginestar-Rasquera e Isla de Graciá.
3º La acción decisiva, en fuerza, parece ha de llevarse en el tercero de los sectores indicados.
4º No parece probable acción por Lérida, si bien, por sus buenas comunicaciones y proximidad al sector de Balaguer, donde hay bastantes fuerzas en segunda línea, no debe descuidarse la vigilancia.»
Este 24JUL se han pasado por la cabeza de puente de Serós cuatro soldados. Afirman que el día anterior su jefe de batallón les había reunido para arengarles, en relación con una inmediata operación.
Por Flix cruza el Ebro otro soldado que también habla de la arenga de un comisario político, el cual les dijo que se preparasen para tomar parte en «Una ofensiva general a todo lo largo del Ebro», citando el pasado además la existencia de fuertes concentraciones de tropas en la región.
El Alto Mando nacional tiene seguridad de que la operación está en marcha.
El general Jorge Vigón, en su diario:
El 15JUL «Es posible que intenten algo, pero la Agrupación de Divisiones de Yagüe resistirá bien.»
El 20: «Es de suponer que en la orilla derecha [del Ebro] estén prevenidos, aunque tienen pocas fuerzas.»
El 21: «Interesa mucho apresurar las operaciones aquí [en el frente de Levante] para estar más libres si efectivamente intentan algo en el Ebro.»
El 23: «No se disimula del todo la inquietud de estos días. Se estudian las posibilidades y se analizan los riesgos» (121).
El almirante Cervera:
«Aquella tarde marchó el Generalísimo a Pedrola, acuciado ya por la amenaza del enemigo en el Ebro, y allí almorzamos.»
El general Kindelan señala que la Aviación pudo acudir el mismo día 25 a combatir en el Ebro, gracias al despliegue de los aeródromos, hecho anteriormente con la idea de “la eventualidad de un ataque por el Ebro o el Segre” .
En el diario de operaciones, redactado por el teniente coronel Coco, jefe de una Brigada de la 105 División, en la noche del 24 al 25 de julio:
Llega la ofensiva roja, que tanto se ha anunciado y tan poco caso se le ha hecho
Calleja escribe que Yagüe informó constantemente al general Dávila sobre todo lo que se preparaba al otro lado del río.
El día 23 «Mi impresión es que muy pronto, quizá en plazo de algunas horas, se desencadenará el ataque enemigo.»
El 24, «La impresión de un ataque inminente se acentúa cada vez más.»
En el otro bando la tensión era igualmente muy grande.
Vicente Rojo
«Conocíamos todos los riegos que la operación comportaba; pensamos que podía fracasar en su mismo comienzo o en el curso de su desarrollo con gravísimas consecuencias; pero sabíamos también que el español es hombre audaz, vehemente, amante del peligro, de lo difícil, quizá también de lo imposible; es el hombre que se estrella ante cosas nimias y que no duda en lanzarse a empresas aventuradas, y ello no era una novedad ni un descubrimiento que hubiera hecho nuestra corta experiencia, sino enseñanza perenne de la Historia» .
Modesto
«Cuando el día 19 de julio las unidades del Ejército del Ebro comenzaron a ponerse escalonadamente en movimiento, a fin de ocupar las bases de partida para forzar el río, los combatientes, los mandos de escuadra, pelotón, sección, compañía, batallón y todos los demás teníamos una confianza absoluta en el éxito de la operación»
Modesto había pedido en la orden del día 22 a sus subordinados, iniciativa, audacia sin inconsciencia, estrecha solidaridad, decisión, rapidez; demasiadas cosas para mandos casi siempre no profesionales, y algunos incluso novatos.
Ramón Prieto, soldado hispanoamericano
«Diez o doce días después el rancho de la noche anticipó acontecimientos. En vez del consabido guiso de lentejas con poco aceite de todos los días, los peroles traían garbanzos con tocino y chorizo. La sospecha se hizo certeza cuando apareció un camioncito, que raramente veíamos, distribuyendo una copa de coñac a cada hombre».
Cecil Eby
«Cuando llegó el camión-cantina, a la hora de la cena, los hombres compraron monos con unos bolsillos inmensos (sesenta pesetas: la paga de tres días) y los llenaron de barras de chocolate, paquetes de cigarrillos y peines de munición. Pocos hombres llevaban botas de cuero. La mayoría calzaban alpargatas con suela de esparto, atadas a los tobillos como zapatillas de ballet. El futuro no era brillante, pero al menos había terminado su agónico período de suspense. Los hombres intercambiaban sonrisas fatalistas. Hacía mucho tiempo que habían abandonado la esperanza de ganar una guerra, y aunque dudaban incluso de poder ganar una batalla se aprestaban a disputar otro sangriento asalto.»
Todos los mandos se situaron en sus puestos.
Andrés García Lacalle describe el de Modesto
«El puesto de observación construido con gruesos muros de cemento, estaba situado en un altozano, muy bien camuflado, puesto que toda la parte superior del cerro o meseta no se había tocado siquiera. Según se entraba al puesto de observación, por el lado izquierdo, mirando hacia el río, seguía un estrecho pasillo que formaba una especie de semicírculo, en cuyo frente había un balcón o mirador bastante largo. Por la misma entrada, pero yendo hacia la derecha, cerraba el semicírculo otro pasillo más ancho y recto donde había una repisa llena de teléfonos. Este magnífico puesto de observación estaba siempre lleno de jefes y oficiales que constantemente entraban y salían y daban y recibían órdenes o instrucciones verbales o telefónicas»
Este primer puesto de mando y observatorio está establecido en el vértice San Pablo (617 metros), a dos kilómetros escasos del pueblo de La Figuera.
La operación se había fijado para la noche del 23 al 24 de julio, pero se retrasó veinticuatro horas «porque faltaba por incorporarse parte de la artillería y de los medios de paso».
La hora H del día D serían las 0 horas 15 minutos del 25 de julio.
Todo está preparado pero en el último momento coronel Lazarev, el consejero ruso de Modesto, pide un nuevo retraso, basándose en que el paso del río «no estaba asegurado técnicamente ». Otro consejero ruso, Soroka, se manifiesta contrario a esta opinión. Fue la opinión que predominó. Si esperamos a tener hasta el último detalle bien atado, nunca empezaremos una batalla, mi experiencia.