El frente está roto, el Mando vasco no es capaz de organizar una línea de contención próxima. La Brigada de Flechas Negras Negras progresa por el norte, la BRI IV por el centro y la BRI I por el sur. La presión es general a lo largo de todo el frente y el empleo de reservas para cerrar todas las penetraciones no parece una solución realista; concentrar la acción de todas las reservas para cerrar un eje de explotación enemigo podría dar lugar al envolvimiento y neutralización de esa fuerza.
La única opción es ceder terreno y acogerse a una línea de contención más lejana.